El corindón es una forma cristalina de óxido de aluminio (Al₂O₃) que se caracteriza por su elevada dureza y resistencia a altas temperaturas. Como materia prima refractaria, se utiliza en la fabricación de materiales que deben soportar condiciones extremas, como ladrillos, moldes y recubrimientos para hornos industriales. Existen dos tipos principales de corindón en aplicaciones refractarias:
Su uso se destaca en la industria metalúrgica, cerámica y del vidrio debido a su excelente resistencia a la abrasión, estabilidad térmica y capacidad para soportar choques térmicos.