Los materiales refractarios son esenciales en industrias que operan a temperaturas extremas, como la siderúrgica, la metalúrgica, la cerámica, la petroquímica y la cementera.
Estos productos se presentan en diversas formas, como ladrillos, concretos, morteros, placas o fibras, y se utilizan para revestir hornos, calderas, chimeneas y otros equipos sometidos a temperaturas elevadas.